¿Cuánto sabemos realmente sobre nuestra zona V?
Aquí hay tres falsos mitos que superar y tres tabúes sobre los que reflexionar, para aprender a conocernos (y reconocernos) mejor en el espejo, con total seguridad.
1. El flujo vaginal siempre es un problema.
FALSO.
El flujo vaginal es, en la mayoría de los casos, perfectamente normal y representa una señal de que nuestra zona íntima está funcionando correctamente, especialmente durante la edad fértil y el embarazo.
Existen diferentes tipos de pérdidas fisiológicas:
- Blancuzco, en varias fases del ciclo menstrual
- Transparente y viscosa, durante la ovulación
- Rojizo o marrón, en caso de manchado, a menudo relacionado con desequilibrios hormonales, estrés o uso de anticonceptivos
¿Cómo reconocer los signos que indican una alteración? Presta atención a:
- Color anormal (amarillo, verde, blanco denso)
- Olor fuerte o desagradable
- Presencia de picazón, ardor o dolor
En estos casos, es mejor evitar los remedios caseros y consultar con un ginecólogo. Mientras tanto, conviene mantener una higiene íntima adecuada y preferir... ropa interior de algodón y transpirable.
2. La sequedad vaginal es algo de lo que avergonzarse
FALSO.
La sequedad vaginal es un fenómeno común que puede ocurrir a cualquier edad, no sólo en la menopausia.
Las causas pueden ser múltiples:
- Cambios hormonales
- Embarazo
- Uso de ciertos medicamentos
- Estrés, entrenamientos intensos, alteraciones en el microbioma
Si no se trata, puede provocar molestias importantes, como picazón, dolor, sangrado leve, disminución del deseo e infecciones del tracto urinario.
¿La buena noticia? Se puede negociar.
A partir de una delicada rutina íntima, productos hidratantes específicos y un estilo de vida saludable (hidratación, sueño, dieta equilibrada). Y si es necesario, Habla con un especialista Sin ningún pudor es el gesto más revolucionario que podemos hacer por nosotros mismos.
3. Si tu periodo es irregular, algo anda mal.
FALSO.
Un ciclo menstrual irregular no es necesariamente un signo de un problema. La duración, intensidad y frecuencia de la menstruación... Son diferentes de mujer a mujer, y puede variar incluso en la misma persona a lo largo de su vida.
Hay menstruaciones abundantes y muy cortas, menstruaciones que llegan puntualmente y otras que llegan inesperadamente. Todo esto puede ser normal, especialmente durante periodos de transición como la adolescencia o épocas de estrés.
El secreto es escucha a tu cuerpoSi tu periodo es especialmente doloroso o la irregularidad persiste en el tiempo, hablar con tu ginecólogo es siempre una sabia elección.